Santiago de Chile, 5 de Abril 2011. (Radio del Mar). Hasta ahora, Chile se ha caracterizado por ser un país donde el Poder Judicial actúa con independencia y con tuición absoluta sobre todos los hechos que son sometidos a su jurisdicción. De la misma manera, actúa en los casos en que se deba recurrir a sistemas judiciales extranjeros, con solicitud de antedentes, órdenes de detención y en último caso, con solicitudes de extradición.
Demás está decir que esto lo cumple con total apego a la legislación vigente en Chile y acuerdos o convenios internacionales en los casos que corresponda.
Sin embargo, han ocurrido hechos en los últimos días que merecen ser investigados. La Ministra en Visita designada para investigar las acusaciones contra el sacerdote Fernando Karadima por abuso sexual contra niños, solicitó a la Iglesia Chilena los antecedentes recabados en Chile por el Juicio Canónico que condenó al acusado, que significó realizar interrogatorios, careos, investigaciones y otras gestiones dentro del territorio nacional. La Iglesia, a través de Mons. Ricardo Ezzati Arzobispo de Santiago, respondió en primera instancia, que eso debía ser solicitado al Vaticano por los conductos regulares, para luego manifestar que esos antecedentes pertenecían a un estado soberano, lo que en el día de hoy fue reafirmado por la Nunciatura Apostólica, que claramente expresó que no serían entregados.
Entendiendo que el Vaticano es un estado soberano: ¿con qué autoridad actuaron sus jueces en territorio chileno? ¿Con qué autoridad estos jueces extranjeros citaron e interrogaron a testigos chilenos? ¿Qué abogados chilenos actuaron? ¿Esos jueces ingresaron al país y actuaron con visa de turista? ¿Estaba el poder judicial chileno informado y autorizó el actuar de estas autoridades del Estado Vaticano? ¿Significa esto que, en caso de no ser así, se pasaron a llevar prerrogativas que solamente corresponden a la justicia chilena? ¿Significa que los jueces de cualquier país pueden venir y realizar juicios en Chile a ciudadanos chilenos?
Actitudes como la señalada, que deberán aclararse, hacen recordar el Concordato entre la Iglesia y el Vaticano en los tiempos del dictador Francisco Franco en España, en que este movimiento religioso actuaba como un poder dentro del estado.*****FIN*****