Santiago, 07 de junio de 2011. (Radio del Mar)– Redes ciudadanas y asambleas realizadas durante los últimos días comenzaron progresivamente a cuestionar el rol que están jugando diversos representantes de organizaciones ecologístas en el contexto de la protesta social detonada por la aprobación ambiental de las represas en la Patagonia. Por ejemplo la Red Ambiental del Norte, que agrupa a más de 46 organizaciones ambientales desde Arica a Valparaíso, rechazó la forma como algunas ONGs, entre ellas el Consejo de Defensa de la Patagonia, Terram y Chile Sustentable, aceptaron la creación de una Comisión Técnica Ciudadana por una Matriz Energética Sustentable para Chile».
Esta comisión Técnica surgio en forma paralela a su simil gubernamental, y fue apoyada en primera instancia por los senadores Antonio Horvath, José Antonio Gómez, Guido Girardi y los diputados Patricio Vellespín, Enrique Accorsi, Juan Luis Castro; además de los ambientalistas Juan Pablo Orrego, Sara Larraín, Flavia Liberona y Patricio Rodrigo.
Según la Red AMbiental del Norte (RAN), «nadie les ha delegado, a quienes aparecen hoy como cabeza del movimiento, ésta facultad; nadie quiere hoy endosar esta responsabilidad a quienes intentan representarnos por la vía burocrática. Muchos de los que se sientan en estas mesas son responsables de la Institucionalidad Ambiental y las leyes se nos impusieron y que nos tienen en la situación actual, como son el Código de Aguas y el Tratado Minero».
La Red de organizaciones alega que «se plantea el problema de la matriz energética como un problema técnico ambiental sin considerar los factores que presionan hacia el engrandecimiento de la oferta energética, como son el lucro y la expansión minera».
«Hay que ir a las causas que generan la depredación ambiental y dañan la salud de nuestros ciudadanos. Es este modelo económico, donde en el afán de lucro infinito, se apropian de nuestros recursos naturales y se los trasforma en mercancía», afirma la red ciudadana.
Agrega que «el problema no es de expertos, si no lo que dice la ciudadanía, que la naturaleza no se trasforme en una mercancía. No queremos la mega minería destructiva, debemos plantearnos una minería de acuerdo a las necesidades del país y no de las trasnacionales, donde además de proceder a la explotación racional de nuestras riquezas básica, lo hagamos preservando nuestras riquezas a mediano y largo plazo».
La Red Ambiental señala que «no podemos delegar en otros la solución de los problemas de nuestras comunidades; los niveles de independencia de los gobiernos de turno que generemos en este nuevo movimiento ciudadano, podrán dar solución a la crisis que hoy vivimos.
