¿No hay en el país clérigos tan dignos, honestos y buenos pastores como el designado, pero que no cargan el sambenito de haber pertenecido a esa especie de “santa” mafia que ha hecho tanto daño, también comunicacional, al pueblo de Dios?
Santiago, 12 de enero de 2015. (Radiodelmar.cl)– Juan Barros, Ex capellan de los militares y discípulo del cura karadima -expulsado de su puesto por abusar sexualmente de menores de edad-, fue nombrado como nuevo obispo de Osorno. A horas de su nombramiento Barros fue denunciado por victimas de Karadima de también estar involucrado en ocultar la verdad y además de besarse y tocarse con el abusador de niños y guia espiritual de numerosas familias adineradas de Santiago de Chile.
Así lo dio a conocer el portal de informaciones del grupo El Mercurio, Soychile.cl, que tituló «Denunciante acusó que el nuevo obispo de Osorno encubría los abusos de Karadima», para luego dar a conocer un contacto con Juan Carlos Cruz, una de las victimas de Karadima.
“Este es un premio injusto a este obispo, es una afrenta a la ciudad, a la diócesis, a los católicos de Osorno, que tienen que aguantar que se les imponga un obispo que callaba los abusos”, dijo Cruz al portal Soychile.cl
Agregó que “Barros fue a Roma a interceder para que a Karadima no se le castigara, a interceder para decir que todos nosotros éramos unos mentirosos y que todo esto era una confabulación contra la Iglesia”.
En su cuenta de twitter además el denunciante afirmó refiriéndose al nuevo obispo de Osorno, que Juan Barros «Se besaba y tocaba con Karadima, veia abusos, encubría y destruía personas, hoy Juan Barros nombrado Obispo de Osorno. Impresentable!»
Las palabras de Cruz son reforzadas por las del sacerdote claretiano Agustín Cabré Rufiat quien afirmó que «Cuando se pensaba que nunca más aparecería un nuevo pastor ligado de alguna manera a esa historia turbia, aparece este anuncio que mas bien parece un “renuncio”».
Con información de
http://www.soychile.cl/Osorno/Sociedad/2015/01/10/298454/Denunciante-de-Karadima-ante-designacion-de-nuevo-obispo-de-Osorno-Es-una-afrenta-a-la-ciudad.aspx
http://noticias.iglesia.cl/noticia.php?id=26685
http://www.reflexionyliberacion.cl/articulo/4035/un-anuncio-o-un-renuncio.html
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¿Un anuncio o un renuncio?
Por: Agustín Cabré, cmf
Ando por Buenos Aires a causa de una de esas eternas reuniones de curas.
Mucho calor húmedo, la enorme casa de jornadas del arzobispado con un parque soberbio pero las habitaciones sin ventiladores como hubiera deseado mi comodidad. Los obispos argentinos deben soportar los 30 grados de las noches porteñas con alto grado de estoica virtud.
Las sesiones de análisis de la realidad, de diálogo sobre temas de evangelización para el mundo del siglo XXI, de búsqueda de los caminos de Dios entre tanto sendero atravesado que confunde la llegada a la meta, nos llevan casi todo el día.
Solamente después de la cena unos van al parque a fumar un pitillo, otros a conversar en un clima fraterno y liviano, otros a jugar al truco, esa diversión apasionante en que las cartas del naipe combinan suerte con mentiras.
Estoy en eso cuando alguien comenta que hubo un anuncio en Chile: fue nombrado nuevo obispo en Osorno. Y en medio de la vorágine de las cartas jugadas se escucha la palabra “renuncio”. Mi compañero de juego ha tenido un renuncio, es decir, cometió severo error al lanzar una carta equivocada.
Pierdo después todas las partidas por estar distraído pensando en que el nombramiento del obispo es un verdadero renuncio en vez de un anuncio.
El hombre elegido seguramente es digno y honesto. No lo dudo. Pero quedó teñido en el escándalo del cura Karadima, de quien fue discípulo y a quien defendió hasta que las pruebas de abusos sexuales llevaron al Vaticano a sacarlo de circulación y encerrarlo en un convento.
Recién entonces los cuatro obispos de ese enjambre de clérigos y laicos que estuvieron al lado de su guía y formador tomaron cierta distancia pública del gurú.
Lo que muchos esperaban era la renuncia de esos pastores a sus diócesis al quedar tan desprestigiados. Han ido quedando porque son hombres piadosos, apostólicos y debieron actuar seguramente de buena fe, aunque se hace muy cuesta arriba creer que no supieran lo que pasaba en su mismo círculo de relaciones más inmediatas. Pero al menos, se han mantenido en un segundo plano.
Por eso, ahora que uno de ellos aparece asumiendo como pastor en la diócesis de Osorno, todo se vuelve a poner sobre la mesa social: los hechos sucios y los abusos de su mentor. No había para qué hacer esa jugada, porque el “renuncio” se veía venir. ¿No hay en el país clérigos tan dignos, honestos y buenos pastores como el designado, pero que no cargan el sambenito de haber pertenecido a esa especie de “santa” mafia que ha hecho tanto daño, también comunicacional, al pueblo de Dios?
Cuando se pensaba que nunca más aparecería un nuevo pastor ligado de alguna manera a esa historia turbia, aparece este anuncio que mas bien parece un “renuncio”. ¡La carta debió ser otra!
Agustín Cabré Rufatt, CMF
El Catalejo del Pepe
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