Durante este 1° de Mayo, las y los trabajadores vinculados a la industria salmonera llamaron a la unidad para luchar por condiciones de trabajo dignas, por la protección de la vida y alcanzar estándares internacionales de seguridad en el trabajo, además de exigir un activo rol del Estado en las actividades de fiscalización y control de las malas prácticas del sector para que exista un desarrollo que realmente beneficie a las comunidades y territorios.
Santiago de Chile, 02 de mayo de 2025. (Ecoceanos News).- En un contexto marcado por la creciente precarización laboral, la desregulación y la subcontratación masiva en la transnacional industria del salmón, dirigentes de las organizaciones sindicales vinculadas a este sector exportador comparten un petitorio mínimo, unificando su lucha en defensa de la vida, el trabajo digno y la justicia laboral. La expansión territorial de esta megaindustria hacia la Patagonia chilena, con la meta de duplicar sus actuales cifras productivas para 2032, ha estado acompañada por un trágico récord: desde 2013 hasta abril de 2025, han muerto al menos 80 trabajadores en centros de cultivo, plantas procesadoras y en el transporte marítimo.
El petitorio mínimo de los trabajadores y las trabajadoras acuícolas contempla demandas fundamentales, tales como el cese de la subcontratación, la eliminación de contratos por obra o faena, y una firme protección de la seguridad y dignidad laboral. Además, exigen detener el récord mundial de muertes laborales en esta industria en Chile, denunciar y combatir las prácticas antisindicales que impiden la organización y defensa de los derechos, garantizar protección efectiva a las trabajadoras embarazadas y reconocer las enfermedades profesionales propias del sector. En el transporte marítimo de la industria exportadora del salmón, las organizaciones sindicales reclaman el cumplimiento de las dotaciones mínimas de seguridad en las naves y centros de cultivo.
Las demandas básicas de los trabajadores y las trabajadoras del salmón en Chile
Gustavo Cortes, vicepresidente de la Federación de Trabajadores del Salmón (Fetrasal) en Quellón y director de Comunicaciones de la Confederación Nacional de Trabajadores del Salmón y Mitílidos de Chile (Conatrasal), denunció la campaña de terror impulsada por la industria salmonera, en complicidad con algunas organizaciones sindicales, que busca presionar y bloquear leyes y regulaciones ambientales y laborales. “Esta estrategia amenaza con la pérdida de empleos y el estancamiento del crecimiento económico regional, mientras las comunidades en las zonas donde opera la salmonicultura siguen sufriendo por la falta de viviendas, agua potable, alcantarillado y electricidad”.
Esto sucede, a pesar de que los ingresos generados por la producción salmonera industria en 2024, alcanzaron los 6.300 millones de dólares (6,3 billones de USD), los cuales “no retornan a las regiones donde operan, profundizando las desigualdades y el abandono”, precisó Cortes a Ecoceanos News. Además, advirtió que la creciente tecnologización de esta industria está reemplazando a la mano de obra en las plantas de proceso industrial y en los centros de cultivo, con una permanente pérdida de empleos.
Otras de las demandas históricas de las y los trabajadores de la industria del salmón lo constituye la eliminación de los contratos por obra o faena, que precarizan las condiciones laborales y limitan la sindicalización, dejando sin protección a las trabajadoras con fuero maternal.
Para Gustavo Cortes, “los accidentes laborales, particularmente en labores de buceo, reflejan la falta de fiscalización y la aplicación de las normas de seguridad laboral, pues las autoridades marítimas y del Trabajo no fiscalizan con regularidad a los centros de cultivo. Las empresas mandantes tercerizan las peligrosas labores de buceo a empresas subcontratistas, sin asumir ninguna responsabilidad por las muertes”.
Federación de Sindicatos Marítimos y de Gente de Mar: Por la defensa de la vida y los derechos de los trabajadores navieros
José Lemuy, secretario de la Federación de Sindicatos Marítimos y de Gente de Mar (Fesimar), señaló a Ecoceanos News que entre los principales problemas que afectan a los trabajadores se encuentran la falta de seguridad en las embarcaciones, la mala habitabilidad de las naves y la existencia de extensos y agotadores turnos de trabajo, lo cual incide en altos niveles de fatiga y de estrés en las tripulaciones. A ello se suma la persecución sindical de las patronales navieras contra los dirigentes marítimos.
Durante los últimos años, denunció Lemuy, “se han registrado innumerables accidentes laborales en el ámbito del trabajo marítimo, consecuencia de que no se respeta la legislación vigente y, mucho menos, los convenios internacionales. Por esta razón, como Fesimar ingresamos en conjunto con la Federación Nacional de Sindicatos de Oficiales de Naves Mercantes y Especiales de Chile (Fenasiomechi) una denuncia contra el Estado de Chile, la cual se encuentra en su etapa final”.
Otro aspecto a considerar es el nepotismo en este sector, lo que es caracterizado por un activo tráfico de influencia existente entre las autoridades marítimas y los empresarios navieros, por lo cual las organizaciones para eliminar estas malas prácticas demandan no depender de la Dirección de Territorio Marítimo (Directemar), sino que sean regulados por un ente civil, como hoy tiene la aeronáutica civil.
Durante este 1° de Mayo, las y los trabajadores vinculados a la industria salmonera llamaron a la unidad para luchar por condiciones de trabajo dignas, por la protección de la vida y alcanzar estándares internacionales de seguridad en el trabajo, además de exigir un activo rol del Estado en las actividades de fiscalización y control de las malas prácticas del sector para que exista un desarrollo que realmente beneficie a las comunidades y territorios. Sus exigencias son claras: acabar con la precarización, garantizar derechos y seguridad, y poner fin a un modelo que, en medio de sus millonarias ganancias, sigue precarizando y colocando en riesgo la vida de quienes producen el salmón que es exportado hacia los mercados internacionales.